Circula por el centro de tu carril, y hazte respetar. Este es un consejo imprescindible. Aún hay mucha gente que circula arrimada a la acera, tanto en el carril de la derecha como el de la izquierda.
Por la carretera hay que circular por el arcén.
Hazte ver por la noche.
El controvertido tema del casco. Aunque por parte de la administración hay una recomendación generalizada para usarlo, no garantiza la total seguridad, y cada cual debe decidir si lo usa o no. En todo caso nos oponemos a que su uso sea declarado obligatorio.
Respeta las normas de circulación. Esto es evidente. Si no te las sabes, deberías pedir que te las enseñen antes de salir.De todos modos, en algunos casos conviene "adaptarlas". Por ejemplo, en los semáforos, es mejor parar unos metros más allá de la línea, y así, cuando arranquen los coches, no tragaremos el humo, y tendremos unos metros de ventaja.
Ata bien la bici. Lo mínimo es usar un candado tipo "Pitón", o un buen candado en forma de "U" rígida, o mejor, los dos tipos a la vez (en este caso, el ladrón tiene que ser un auténtico manitas). Las cadenas de cable delgado se abren con un mordisco, o sea, que a lo más sirven para asegurar una rueda o el sillín. Las bicicletas viejas y despintadas no se salvan de esta recomendación. Hay que atar el cuadro y las dos ruedas, cosa que muchas veces no se hace bién.
Silba o canta. Pero deja la música en casa. Los auriculares no te permiten controlar el tráfico que se encuentra a tu espalda.